Chistian Poveda nos acerca una fórmula diferente de mostrar el fenómeno: adentrándose en el interior del mismo. Su coraje y valentía hace despertar la conciencia de un país sumido en una profunda decadencia social, donde la marginalidad y la violencia parecen ser el alimento.
Muertes, asesinatos, extorsión, robo, tráfico de drogas... son las realidades a las que se enfrentan estos grupos pandilleros que, lejos de buscar la reinserción en la sociedad, se mueven por lemas como "matas para vivir y vives para matar... la 18".
Muchos son los periodistas que mueren al intentar informarnos sobre lo que ocurre en el mundo. Conflictos armados, guerras, zonas de miseria y pobreza, son las situaciones en las que pueden ser asesinados estos profesionales, los cuales arriesgan la vida para mostrarnos lo que pasa en ciertos lugares. Mientras los civiles huyen para esconderse del peligro, los periodistas se acercan y se involucran en él.
Es el caso de Christian Poveda, periodista asesinado en El Salvador y el cual se juntó con dos bandas peligrosas y enfrentadas entre ellas. No es una imprudencia por parte de ellos, solamente están intentando realizar su trabajo, expresarse y denunciar hechos. Pero, ¿a quién se puede culpar por las numerosas pérdidas de éstos?
En el documentalLa vida Loca, Povedaquería dar a conocer la forma de vida de una de las pandillas de El Salvador llamada la Mara 18. En su trabajo se muestra desde la vida cotidiana de éstos hasta el sufrimiento que pasan tras presenciar violencia y muerte de algunos de sus miembros. Para Christian Poveda el final también fue trágico.
La vida locaes un excelente documental sobre las llamadas maras salvadoreñas realizado por el director franco-español Christian Poveda. Durante casi un año y medio el director se infiltra en una de estas pandillas, "La mara 18" en la colonia La Campanera, en Soyapango.
En América Central se les llama maras y son una copia del modelo de las pandillas de Los Ángeles creadas por los salvadoreños que emigraron durante la guerra civil a principios de los años 80.
Este trabajo nos muestra la violencia, muerte, rituales y sufrimiento que conforman el día a día de esta pandilla. El 2 de Septiembre de 2009 Poveda fue asesinado a balazos por mareros mientras caminaba por una calle que conduce a Tonacatepeque.
